¿Sabes de qué color es el Lugol? La fórmula l2 + Kl + H2O del Lugol crea una solución marrón oscuro, característica propia del yodo. Sin embargo, esta coloración puede variar dependiendo del tipo de prueba que sea realizada.
Dicha prueba puede emplearse para determinar si una muestra posee almidón en su composición, dando como resultado un cambio en el colorante Lugol. Esta reacción podrá ser de color azul oscuro, morado o negro según sea el nivel de concentración de la sustancia.
Cabe destacar que para comprobar el resultado de la prueba se procede a someter la solución a cambios de temperatura. Es decir, si durante la primera prueba hubo reacción a temperatura ambiente o fría se calienta la muestra.
Esto hará que la nueva coloración se torne marrón o vuelva a su estado natural hasta que la temperatura disminuya, dando lugar a una nueva reacción para validar el resultado.
El color del Lugol también puede cambiar cuando la solución se utiliza como oxidante. Si esta prueba se realiza en alimentos, podrá determinarse si son o no antioxidantes. En caso de haber una reacción, arrojará un color rojizo que desaparece después de algunos minutos.
Entonces, ¿qué sucede cuando existe una reacción química en la prueba de Lugol? Esto significa que el resultado es Lugol Positivo. Por ejemplo, si la prueba se aplica con fines médicos, puede determinar que existen células anormales en el tejido.
Por lo general, indican la presencia de cáncer, infecciones, inflamación y problemas de salud que podrán ser diagnosticados a través de otros exámenes médicos.
¿Cómo Entender un Resultado Negativo con Lugol?
Si el cambio de Lugol color de una muestra indica un resultado positivo para la prueba, ¿qué sucede cuando no hay reacción? La reacción ocurre por medio de la inclusión de Lugol en los espacios vacíos de los polisacáridos, ampliamente evidente en el almidón.
Esto indica que se ha alterado la molécula modificando sus propiedades. Cuando dicha inclusión no se lleva a cabo se puede diferenciar el resultado entre Lugol positivo y negativo. Para este caso en particular el resultado definitivo es negativo. No se han detectado anomalías y no existen rastros de almidón en la muestra.
Por ejemplo, en una muestra de almidón hidrolizado en la que se añade colorante Lugol se obtiene un color rojo que indica glucosa, dando positivo al reactivo. En caso de que la muestra sea almidón sin hidrolizar, adquiere una coloración azul sin alteración evidente al cambio de temperatura.
Este resultado es negativo y se puede determinar que la segunda muestra no posee almidón en su estructura molecular.
Lo mismo ocurre al utilizar el colorante Lugol como reactivo en pruebas ginecológicas y donde se puede presentar un cambio en su tonalidad. En este particular, el color del tejido varía del blanco al amarillo para un resultado positivo.
En cambio, cuando el Lugol cubre toda el área sin reacción indica que las células no presentan alteración. En su defecto, el color Lugol será caoba o marrón para indicar que el resultado es negativo para cáncer u otra patología ginecológica.
